lunes, 3 de mayo de 2010

¿y el mea culpa del periodismo?

Una de las grandes cualidades de internet es la multiplicidad de información disponible y la posibilidad inmediata de acceso. Su contra es, al menos en Catamarca, el reducido acceso a ella por parte de la población. No existen cifras oficiales, y si las hubiera serían manipuladas seguramente.
Tener la posibilidad de consultar y leer múltiples diarios locales frente a la pantalla de una computadora, debiera ser en un futuro cercano una buena costumbre, una posibilidad de educar y formar a la sociedad en el sano ejercicio de la crítica y el debate. Piezas fundamentales, aquellas, para aprender a ejercer el voto en las distintas instancias cívicas.
Un periodista cuando escribe, o habla frente a un micrófono, no sólo está informando u opinando también está educando, cualquiera sea su disciplina.
Se educa mal y peor, mal intencionadamente cuando no hay objetividad en la postura educativa. En todo caso dejar en claro en el inicio del comentario cual es la ideología o punto de vista a tratar para que el lector, escucha o alumno analice a que tipo de conclusiones puede llegar influenciado por el informe o nota que está consumiendo.
En la versión digital de diario La Unión, el comentario titulado "En búsqueda del mismo norte", se hace referencia a los políticos que trabajan "de políticos" y en cada fin de ciclo merodean a los jefes para conseguir la venia y seguir por otro período más en el exclusivo círculo de poder público.
Escondidos o la vista se las ingenian para seguir prendidos a la tutela gubernamental sin tener el mérito de trabajar de verdad por sus representados.
Si estos Velociraptor o Tiranosaurio Rex del ambiente político son conocidos y siguen sobreviviendo, no permitiendo el surgimiento de nuevas especies ¿quién está favoreciendo su supervivencia?. ¿Quienes tienen la oportunidad de llegar a las masas y crear conciencia?...
Respuesta: El periodismo.
En toda agenda de un político, siempre está el nombre de un periodista amigo que servirá de puente para promocionar una campaña disfrazada de reportaje o entrevista "exclusiva". "Los favores, con favores se pagan" dice el refrán.
Si la sociedad no tiene los políticos que necesita, una parte de la culpa la poseen los periodistas que perdieron el rumbo de su profesión y los medios a los cuales representan. La otra parte de la culpa es la paupérrima educación del pueblo.

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